Índice
Puntos clave
- La FDA está permitiendo a los fabricantes de alimentos realizar pequeños cambios en los ingredientes de sus productos sin ajustar la etiqueta de los alimentos si el COVID-19 causa problemas en la cadena de suministro.
- Esta política permanecerá vigente mientras el HHS considere que el COVID-19 es una emergencia de salud pública, o por más tiempo según sea necesario.
- Las tolerancias en las etiquetas de los alimentos, incluso para cambios mínimos en los ingredientes, pueden suponer riesgos importantes para las personas con alergias alimentarias.
La pandemia de COVID-19 ha obligado al mundo a adaptarse a muchos cambios, incluidos los cambios en la cadena de suministro de alimentos. Muchos agricultores y empresas alimentarias han experimentado escasez de suministro, interrupciones laborales y cambios en la demanda. Como resultado, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) ha permitido flexibilidades temporales, las últimas de las cuales incluyen cambios en los requisitos de etiquetado de los alimentos.
La guía, publicada el 22 de mayo, permite a los fabricantes de alimentos sustituir, omitir, reducir o reabastecer ingredientes en sus productos sin cambiar las etiquetas, algo que no estaba permitido hace dos meses.
“Nuestro objetivo es brindar flexibilidad regulatoria, cuando sea apropiado, para ayudar a minimizar el impacto de las interrupciones de la cadena de suministro asociadas con la actual pandemia de COVID-19 en la disponibilidad de productos”, dice la guía de la FDA.
Si bien muchas empresas de alimentos acogen con agrado este cambio para asegurarse de poder seguir vendiendo sus productos, incluso cambios menores en la formulación pueden representar un riesgo para los 32 millones de estadounidenses con alergias alimentarias.
Qué significa esto para usted
A la mayoría de las personas probablemente no les importen demasiado los cambios menores en sus productos alimenticios. Pero las personas con alergias, tanto comunes como raras, deben comunicarse con los fabricantes para obtener actualizaciones sobre cualquier cambio en los ingredientes que no se refleje en la etiqueta.
¿Qué implica exactamente el cambio de política?
Antes del COVID-19, si un fabricante cambiaba un ingrediente en su alimento, la FDA exigía que la etiqueta reflejara ese cambio, lo que requería tiempo y recursos.
Ahora, con una escasez de suministros y una interrupción en la cadena de suministro, la guía de la FDA tiene como objetivo ayudar a los fabricantes que pueden necesitar realizar cambios menores en sus productos y, al mismo tiempo, asegurarse de que la seguridad de las personas no se vea afectada.
Lo ideal, dice la FDA, es que los fabricantes actualicen las etiquetas cuando necesiten cambiar las fórmulas de los productos debido a interrupciones o escasez de suministros relacionadas con la COVID-19, o que agreguen etiquetas que reflejen los cambios si no se pueden imprimir etiquetas completamente nuevas. Pero la FDA reconoce que los recursos limitados pueden hacer que esto no sea práctico. Como resultado, está “ofreciendo flexibilidades temporales en el etiquetado”.
La guía de la FDA permite cambios menores en la formulación si se alinean con los factores que se indican a continuación.
Seguridad
El cambio de ingredientes no provoca ningún efecto adverso para la salud al añadir los principales alérgenos:
- Leche
- Huevos
- Pez
- Mariscos
- Frutos secos
- Miseria
- Trigo
- Soja
- Gluten
- Sulfitos
Si se añaden o sustituyen estos ingredientes, los fabricantes deben modificar la etiqueta. La adición de otros alérgenos potenciales más presentes en otros países, como el sésamo, el altramuz, el trigo sarraceno y el apio, también justifica un cambio de etiqueta.
Cantidad y prominencia
El ingrediente que se sustituye por el ingrediente indicado en la etiqueta no puede ser un componente principal del producto. Las sustituciones no indicadas solo se permiten para ingredientes que estén presentes en el alimento en una proporción del 2 % o menos.
Por ejemplo, si la salsa para pasta dice “elaborada con hongos” y la lista de ingredientes incluye hongos portobello, la FDA no se opone a una sustitución temporal no incluida en la lista de hongos.
Caracterización
La sustitución de ingredientes no modifica por completo el producto. Si, por ejemplo, quieres comprar pan con pasas, el fabricante no puede utilizar arándanos rojos en lugar de pasas.
Reclamos
Cambiar u omitir ingredientes no cambia ninguna declaración voluntaria de salud o nutrición ya impresa en la etiqueta.
Nutrición/Función
La sustitución u omisión de un ingrediente no puede cambiar la nutrición del producto. Por ejemplo, un producto no puede tener menos fibra de la que se indica en la etiqueta debido a un cambio de ingrediente.
Ejemplos de cambios de ingredientes aceptados por la FDA
La guía de la FDA establece ejemplos específicos de casos en los que se permiten cambios menores en la formulación sin cambios en la etiqueta.
- Reducciones y omisiones: Una quiche de verduras puede tener menos pimientos que antes o una sopa instantánea puede no contener guisantes.
- Ubicaciones de abastecimiento: Los ingredientes pueden provenir temporalmente de lugares nacionales o internacionales distintos de los que aparecen en la etiqueta. Por ejemplo, una etiqueta puede decir “pasas de California”, pero pueden ser de otro estado o de otro país.
- Colorantes artificiales: Los aditivos de color que no estén certificados por la FDA pueden usarse como reemplazos de colorantes certificados siempre que no representen un riesgo de alergia.
- Sabores y especias: siempre ha existido cierta flexibilidad en el etiquetado con términos genéricos como saborizantes y especias. Las nuevas pautas indican que estos tipos de ingredientes se pueden cambiar sin modificar la etiqueta, siempre y cuando no exista la posibilidad de una reacción alérgica.
Pequeños cambios en los sabores y especias pueden ser problemáticos para personas con alergias muy raras a sabores que pueden derivarse de proteínas como la leche y el maní.
- Grasas y aceites: Las grasas y los aceites se pueden cambiar si están muy refinados, si las sustituciones no suponen un riesgo de alergia y si pertenecen a la misma familia de aceites. Por ejemplo, el aceite de canola no se puede sustituir por sebo de vacuno, porque no se puede sustituir un aceite vegetal por una grasa animal. Pero el aceite de canola sí se puede sustituir por aceite de girasol.
Si bien la FDA no considera que los aceites altamente refinados, como el aceite de maní, el aceite de frutos secos, el aceite de sésamo y el aceite de soja, sean alergénicos, algunas personas pueden reaccionar a ellos. Una persona con alergia al maíz puede reaccionar al reemplazo del aceite de canola por aceite de maíz.
¿Cuánto tiempo durará esto?
La FDA dice que estas flexibilidades de etiquetado permanecerán vigentes durante el tiempo que sea necesario para garantizar un suministro adecuado de alimentos durante y después de la pandemia.
“Esta política tiene como objetivo permanecer vigente solo mientras dure la emergencia de salud pública relacionada con el COVID-19”, afirma la FDA. “Sin embargo, reconocemos que el sector alimentario y agrícola puede necesitar más tiempo para restablecer el orden normal de sus cadenas de suministro. Por lo tanto, una vez finalizada la emergencia de salud pública, la FDA tiene la intención de considerar y comunicar públicamente si se justifica una prórroga, total o parcial, en función de los comentarios recibidos sobre esta guía y nuestra experiencia con su implementación”.
En otras palabras, no está claro exactamente cuánto durará esto.
¿Qué pueden hacer las personas con alergias alimentarias?
La relajación de las normas sobre el etiquetado de ingredientes puede ser preocupante, tanto para las personas con alergias alimentarias como para los padres de niños con alergias alimentarias.
“Tenemos que preguntarnos por qué las recomendaciones de la FDA son tan vagas y por qué les dan a los fabricantes tanta libertad de acción”, explica a Health Life Guide Dave Bloom, director ejecutivo de SnackSafely.com y padre de un niño con alergia alimentaria. “Los consumidores deben llamar a los fabricantes y hacer preguntas detalladas. ¿Puedo confiar en la etiqueta?”.
Bloom dice que debes preguntar si los ingredientes han cambiado o si los ingredientes en las instalaciones de procesamiento han cambiado. Además, limítate a las marcas que conoces y en las que confías.
Según Bloom, SnackSafely.com ha contactado a sus más de 120 fabricantes asociados para que se comprometan a no cambiar los ingredientes de sus productos sin reflejarlos en la etiqueta. Hasta ahora, casi la mitad ha asumido el compromiso y prevé que habrá más.
Las organizaciones sin fines de lucro que se dedican a las alergias están pidiendo a la FDA que reforme esta flexibilidad en las etiquetas. Puede hacer oír su voz enviando comentarios por correo electrónico o escritos.
La información de este artículo está actualizada a la fecha indicada, lo que significa que puede haber información más reciente disponible cuando lea esto. Para obtener las actualizaciones más recientes sobre COVID-19, visite nuestra página de noticias sobre el coronavirus .