El dolor psicógeno es el término que se utiliza para describir el dolor causado principalmente por factores psicológicos, como la depresión y la ansiedad. Si bien el dolor psicógeno no está causado por una patología física clara, es un tipo muy real de dolor crónico. Las personas con depresión y ansiedad pueden manifestar dolor psicógeno en todo el cuerpo, incluso cuando no existe una causa física aparente.
El dolor psicógeno suele ser más difícil de tratar que el dolor nociceptivo o el dolor neuropático . Los analgésicos tradicionales están diseñados para tratar problemas físicos, como la inflamación o la disfunción nerviosa.
Sin embargo, en el caso del dolor psicógeno, a menudo no hay una causa física que encontrar y tratar. Los tratamientos no farmacológicos para el dolor, como la TENS y la distracción, tienden a ser más eficaces para reducir el dolor psicógeno que los analgésicos tradicionales.
Índice
¿Qué desencadena el dolor psicógeno?
Aunque este dolor es muy real para quienes lo experimentan, no existe una prueba específica para determinar si se tiene dolor psicógeno.
Este tipo de dolor puede tener muchos factores psicológicos diferentes que pueden desencadenarlo, exacerbarlo o mantenerlo:
- Creencias
- Emociones
- Miedos
- Enfermedades mentales como depresión o ansiedad.
Síntomas
El dolor psicógeno puede presentarse de diversas formas. A continuación, se enumeran algunos síntomas comunes atribuibles a esta afección:
- Dolores musculares
- Dolores de estómago
- Dolores de espalda
- Dolores de cabeza
Cómo determina un médico si usted tiene dolor psicógeno
Cuando acude al médico por dolor, este le realizará un examen físico para determinar el origen físico o neurológico de este dolor. En el caso del dolor psicógeno, no hay hallazgos físicos o orgánicos tangibles ni son lo suficientemente sustanciales como para explicar el dolor que experimenta.
En cambio, los factores psicológicos contribuyen a la aparición, la gravedad y la exacerbación del dolor. Su médico debe solicitarle una historia clínica para descubrir dichos factores psicológicos.
Repercusiones del dolor psicógeno
El dolor psicógeno puede tener consecuencias graves y erosionar la calidad de vida y el estado de salud. En primer lugar, las personas con dolor psicógeno pueden faltar al trabajo debido al dolor.
En segundo lugar, las personas con dolor psicógeno a menudo pasan mucho tiempo consultando a profesionales sanitarios intentando descubrir cómo tratar el dolor.
En tercer lugar, el dolor psicógeno puede contribuir al abuso y la dependencia de analgésicos (pensemos en analgésicos opiáceos como Vicodin).
Tratamiento
El dolor psicógeno puede ser difícil de tratar adecuadamente. A menudo, los profesionales de la salud mental trabajan con médicos para tratar esta afección. A continuación, se indican algunos tratamientos posibles para el dolor psicógeno:
- Analgésicos no narcóticos (piense en AINE como paracetamol o ibuprofeno)
- Psicoterapia
- Antidepresivos
Los analgésicos opioides no son una buena opción de tratamiento para el dolor psicógeno. Estos medicamentos no atacan la causa principal de esta afección, que es psicológica, y en cambio pueden derivar en abuso y dependencia, que son problemas aterradores por sí mismos.