La midodrina es un medicamento que se utiliza para tratar una afección conocida como hipotensión ortostática . La palabra “ortostática” se refiere a estar en posición erguida, e “hipotensión” se refiere a una presión arterial (PA) inusualmente baja. En otras palabras, cuando se tiene hipotensión ortostática, la presión arterial desciende a medida que se adopta una posición erguida.
Un médico u otro profesional de la salud puede diagnosticarle hipotensión ortostática si el valor sistólico (el valor superior) de su presión arterial desciende más de 20 mm Hg (milímetros de mercurio) o si el valor diastólico (el valor inferior) desciende más de 10 mm Hg cuando se pone de pie. Este medicamento también se conoce con los siguientes dos nombres comerciales: Orvaten y Proamatine.
Índice
Usos
La midodrina pertenece a una clase de medicamentos llamados agonistas alfa-adrenérgicos. Estos medicamentos actúan estimulando el estrechamiento de los vasos sanguíneos, lo que aumenta la presión arterial. La midodrina se presenta en forma de comprimidos y solo se consigue con receta médica.
Su proveedor de atención médica puede recetarle midodrina si tiene una presión arterial significativamente baja que le impide realizar sus actividades diarias. Su proveedor de atención médica deberá considerar el grado en que su afección afecta su vida al elegir un medicamento para usted.
Los síntomas de midodrina que podrían interferir con su vida diaria incluyen mareos intensos, aturdimiento al estar de pie y sensación de que se va a desmayar, también conocido como síncope.
Un estudio publicado en el British Journal of Cardiology demostró que la midodrina puede ser útil para un tipo específico de síncope conocido como síncope reflejo , en el que hay una pérdida de conciencia a corto plazo debido a un reflejo neural, que produce una presión arterial más baja.
Administración
Por lo general, la midodrina se toma tres veces al día: por lo general, por la mañana, a media tarde y antes de la cena. Es posible que su médico le pida que espacie constantemente las dosis del medicamento a lo largo del día y que finalice a una hora determinada antes de acostarse.
Como ocurre con la mayoría de las recetas, deberá tomar su medicamento de la manera indicada por su proveedor de atención médica y deberá tomarlo aproximadamente a la misma hora todos los días.
Dado que el objetivo de la terapia farmacológica es disminuir los síntomas de la presión arterial baja cuando usted está de pie, deberá evitar tomar el medicamento durante la noche.
Si necesita permanecer acostado durante un período de tiempo considerable, es posible que reciba instrucciones específicas sobre cómo posicionarse en la cama. Una forma de hacerlo puede ser elevar la cabeza cada vez que tome una siesta o duerma por la noche.
Si olvida tomar una dosis del medicamento, tómela lo antes posible, siempre que sea dentro del plazo indicado por el médico. Sin embargo, si se acerca la hora en que debe tomar la siguiente dosis, omita la dosis que olvidó y vuelva a tomar su medicación habitual. Intente no tomar una cantidad mayor o menor del medicamento que la recomendada por su médico.
Efectos secundarios
Con cualquier medicamento pueden presentarse efectos secundarios, que pueden variar en intensidad, desde leves a más graves. En ocasiones, algunos de los efectos indeseables pueden desaparecer a medida que el cuerpo se adapta al medicamento. Sin embargo, si los síntomas persisten, empeoran o son difíciles de tolerar, consulte con su médico lo antes posible. Los efectos secundarios que es más probable que se presenten al tomar este medicamento incluyen:
Efectos secundarios comunes
- Picazón en el cuero cabelludo
- Sensaciones de entumecimiento y hormigueo.
- Escalofríos, temblores o sensación de frío.
- Presencia de piel de gallina
- Cambios en los hábitos urinarios como frecuencia, urgencia o retención.
- Sentirse nervioso o ansioso
Si bien existe la posibilidad de que se produzcan los siguientes efectos secundarios, es menos probable que ocurran. Entre ellos se incluyen erupciones en la piel, dolores de cabeza, náuseas o dolor abdominal, sequedad de boca, dificultad para dormir y calambres en los músculos de las piernas.
Algunos efectos secundarios asociados con la toma de midodrina pueden ser graves y debe hablar con su médico de inmediato si experimenta alguno de ellos. Son los siguientes:
- ritmo cardíaco lento
- desmayo
- Sentirse mareado
- episodios de confusión
- cambios en la visión
- Una sensación extraña en el pecho
Tenga en cuenta que esta no es una guía completa de los efectos secundarios, por lo que puede experimentar síntomas que no están en esta lista. Si nota efectos no deseados al comenzar a tomar este medicamento, informe a su médico.
Precauciones
Si ha tenido una reacción alérgica a la midodrina o a los ingredientes que contiene, es mejor evitar este medicamento y hablar con su médico sobre otras opciones. Si desea una lista de los ingredientes del medicamento, puede obtenerla de su farmacéutico.
Además, informe a su proveedor de atención médica si está tomando otros medicamentos, ya sean recetados o de venta libre, hierbas o suplementos. Ciertos medicamentos pueden aumentar la presión arterial. Algunos de esos medicamentos incluyen, entre otros, digoxina, fludrocortisona, ciertos antidepresivos, medicamentos para el asma y medicamentos para la tiroides.
Es posible que no pueda tomar este medicamento si está tomando otros medicamentos recetados que reducen la presión arterial.
Si desea obtener más información sobre midodrina y el uso de otros medicamentos, hable con su farmacéutico o proveedor de atención médica.
Una palabra de Health Life Guide
Si hay algo que no entiende sobre el uso de midodrina o cualquier otro medicamento, consulte a su médico o farmacéutico para que le aclare la situación y así evitar confusiones. Como siempre, tome su medicación según lo prescrito por su médico y asista a las citas para los análisis de laboratorio que le solicite su médico para controlar la respuesta de su cuerpo al medicamento.
Si siente que el medicamento no le ayuda a controlar su afección, su afección empeora o experimenta efectos secundarios indeseables, informe rápidamente a su proveedor de atención médica lo que está sucediendo; es posible que deba reevaluar y considerar otras opciones de tratamiento.