Si es un golfista apasionado que se va a someter a un reemplazo de rodilla , debe tomar precauciones al volver a practicar su deporte. Si bien la mayoría de los cirujanos no le dirán que evite jugar al golf, esto puede generar una tensión adicional en su nueva rodilla. Ser diligente en su rehabilitación y realizar algunas modificaciones puede ayudar a reducir los riesgos.
Índice
Cómo hacer que los reemplazos de rodilla duren más
Tanto los pacientes como los médicos están interesados en hacer todo lo posible para garantizar que el reemplazo de rodilla dure el mayor tiempo posible . Mejorar el diseño del implante, garantizar que los reemplazos se inserten y alineen correctamente y asesorar a los pacientes sobre conductas pueden ayudar a que los reemplazos duren el mayor tiempo posible.
Existen actividades que imponen más fuerza y estrés a los pacientes que han sufrido un reemplazo de rodilla y, por ello, los cirujanos suelen pedir a los pacientes que eviten las actividades deportivas de impacto, como correr y saltar. Sin embargo, no hay muchos datos que sirvan de guía para recomendar qué actividades es mejor evitar.
¿Cuánta tensión soportan los implantes?
Un estudio de 2008 cuantificó qué actividades causan más estrés en los implantes de reemplazo de rodilla. A un puñado de pacientes que requirieron reemplazo total de rodilla debido a una artritis de rodilla severa se les colocaron implantes especiales de reemplazo de rodilla. Dentro de estos implantes había sensores de presión integrados que podían brindar información precisa sobre cuándo los implantes experimentaban fuerzas y presiones inusuales.
El estudio descubrió, como se sospechaba, que las actividades de bajo impacto, como la bicicleta estática, generaban muy poca tensión sobre los implantes de reemplazo de rodilla. Por otro lado, actividades como correr y jugar al tenis generaban, como era de esperar, una tensión mayor sobre los implantes. Sin embargo, hubo algunas sorpresas: el golf generaba una de las tensiones más altas sobre los implantes de reemplazo de rodilla. En concreto, las fuerzas de torsión sobre la rodilla delantera del swing de golf fueron algunas de las fuerzas más altas analizadas.
¿Golf o no golf?
Entonces surge la pregunta: ¿deberían los médicos recomendar a sus pacientes con prótesis de rodilla que eviten jugar al golf? Tendrá que hablar con su cirujano sobre sus recomendaciones específicas, ya que la mayoría de los cirujanos no recomiendan a los pacientes que eviten jugar al golf.
Hay información limitada sobre qué actividades realmente ejercen más presión sobre los implantes, pero el estudio de 2008 indicó que el golf podría ser una actividad que conduce a un desgaste más rápido de la articulación implantada. Dicho esto, se trata de un estudio muy pequeño, que analizó un implante de reemplazo de rodilla específico. Una revisión de estudios de 2017 concluyó que los golfistas que se someten a una artroplastia total de cadera, rodilla u hombro pueden volver a practicar deporte de forma segura.
Las mejoras en los implantes de reemplazo de rodilla pueden ayudar a abordar estos problemas, y algunos tipos particulares de implantes pueden ayudar a los pacientes que desean participar en actividades que imponen tensiones particulares en la articulación de la rodilla.
El golf tiene beneficios como hacer ejercicio, mantener el peso bajo y mejorar la salud emocional. Puede valer la pena (y a menudo lo hace) el posible riesgo de la longevidad del implante para los pacientes de reemplazo de rodilla para participar en estas actividades que les brindan estado físico y alegría.
La otra cara de este argumento es que el aumento de peso también puede aumentar la tensión sobre los implantes. El golf es una actividad que permite que las personas hagan ejercicio. Salir al aire libre, caminar y moverse son actividades buenas para los pacientes con prótesis de rodilla. Si un poco de golf es lo que mantiene a las personas en movimiento, entonces tal vez valga la pena el estrés sobre el implante.
Precauciones para volver a jugar al golf
Hable con su médico y fisioterapeuta sobre su regreso al golf. Probablemente le indicarán cuánto tiempo debe pasar antes de poder jugar al golf. Se necesitan tres meses de rehabilitación y fortalecimiento para que la rodilla recupere la fuerza del lado no operado. Es probable que no le den el alta para volver a jugar al golf hasta 18 semanas después de la cirugía.
Una recomendación específica es proteger la rodilla durante el swing de golf. Si la rodilla delantera tiene un reemplazo (la rodilla izquierda si juega al golf con la mano derecha), soportará una fuerza rotatoria durante el swing de golf. Al principio, es posible que desee realizar solo golpes cortos o realizar swings de media o tres cuartas partes. Puede reducir la torsión si no usa tacos o usa solo tacos suaves.
Limite el número de hoyos que juega al principio. Como siempre, el dolor debería ser la señal de que su rodilla ya ha tenido suficiente por hoy.