Una pasta verdaderamente baja en carbohidratos es una especie de Santo Grial para las personas con diabetes. La mayoría tiende a evitar este alimento popular porque puede provocar graves aumentos en los niveles de glucosa (azúcar) en la sangre, por lo que no es sorprendente que en 2007 un fabricante de pasta llamado Dreamfields informara de unas impresionantes ventas de 14,6 millones de dólares tras afirmar que sus productos de pasta “Healthy Carb Living” podrían ayudar a mejorar los niveles de glucosa.
Sin embargo, siete años después, Dreamfields se vio enredado en una demanda colectiva de 8 millones de dólares por fraude de etiquetas, lo que la obligó a realizar cambios sustanciales en la forma en que comercializa y etiqueta sus productos.
Después de eso, la pasta de Dreamfields todavía está disponible en los estantes de los supermercados, pero la historia de la demanda subraya por qué es vital que las personas con diabetes (o cualquier otro problema de salud que requiera un control dietético cuidadoso) sean consumidores inteligentes. Eso significa leer las etiquetas con atención y con un grado significativo de escepticismo sobre las afirmaciones que parecen “demasiado buenas para ser ciertas”.
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Las reivindicaciones
Dreamfields se metió en problemas por varias razones. Por un lado, afirmó que la “fórmula pendiente de patente y el proceso de fabricación único” que se utiliza para elaborar sus productos creaban “una matriz dentro de la pasta que protegía 31 gramos de carbohidratos de ser digeridos”.
En otras palabras, la compañía afirmó que cualquiera que comiera su pasta no absorbería todos los carbohidratos que contenía y, por lo tanto, no experimentaría el aumento en los niveles de azúcar en sangre que generalmente sigue a la ingestión de pasta normal.
Según la demanda , cada caja indicaba que el producto que contenía sólo tenía “5 g de carbohidratos digestibles por porción” y un “índice glucémico 65 % menor” que otros tipos de pasta.
Lamentablemente, Dreamfields no publicó pruebas de que su pasta fuera eficaz para modular los niveles de azúcar en sangre. Es más, cuando investigadores independientes analizaron la respuesta glucémica de un pequeño número de personas al consumo de pasta Dreamfields, descubrieron que los sujetos tenían exactamente la misma respuesta glucémica a Dreamfields que a otras pastas.
Las consecuencias
Estos hallazgos, publicados en la revista Diabetes Care en febrero de 2011, fueron citados en la demanda interpuesta contra Dreamfields por cuatro consumidores que compraron su pasta basándose en las afirmaciones y luego dejaron de comprarla cuando se enteraron de que eran falsas. (Cabe señalar que el estudio fue retirado posteriormente por los autores, no porque los hallazgos fueran erróneos, sino “porque algunos de los datos se obtuvieron antes de recibir la aprobación del IRB [Consejo de Revisión Internacional]”).
Finalmente, según la organización sin fines de lucro ClassAction.org, Dreamfields tuvo que reembolsar a los consumidores que habían comprado su pasta 1,99 dólares por hasta 15 cajas, y “eliminar todas las declaraciones en sus cajas de pasta que afirman que el producto tiene un índice glucémico más bajo que las pastas tradicionales, que puede reducir los picos en los niveles de azúcar en sangre y que sólo tiene cinco gramos de carbohidratos digeribles”.
El resultado final
Los productos de pasta Dreamfields, que consisten en siete formas comunes de pasta, desde lasaña y lingüini hasta espaguetis y rotini, están hechos con el mismo tipo de harina que la pasta normal (sémola enriquecida). Contienen 41 gramos de carbohidratos por cada porción de una taza de pasta cocida, todos los cuales son absorbidos por el cuerpo.
Sin embargo, Dreamfields también contiene inulina agregada , un tipo de fibra que se encuentra en frutas y verduras y que supuestamente tiene una serie de posibles beneficios para la salud, incluido, según una investigación muy preliminar, un efecto positivo en los niveles de azúcar en sangre. Dreamfields también tiene un poco más de proteína que otras marcas de pasta y algunas vitaminas B. (Sin embargo, no está libre de gluten, por lo que no es seguro para personas con enfermedad celíaca).
¿Qué significa esto para los consumidores que cuentan los carbohidratos , especialmente para las personas con diabetes ? Nada más que eso: cada persona reacciona de manera diferente a los distintos alimentos, por lo que cualquier persona con diabetes debería controlar su nivel de azúcar en sangre dos horas después de cada comida para controlar su afección en lugar de creer en afirmaciones demasiado buenas para ser ciertas.
Si tiene diabetes y ha probado la pasta Dreamfields y le gusta su sabor, y si después de comerla descubre que no provoca un aumento repentino de sus niveles de glucosa de la misma manera que la pasta tradicional, no hay motivo para no seguir comiéndola. Sin embargo, es posible que desee hablar con un educador en diabetes certificado o un dietista para asegurarse de que Dreamfields sea una opción saludable para su repertorio dietético.