Un estudio esquelético es una serie de radiografías que incluyen todo el esqueleto. Los estudios esqueléticos pueden solicitarse por diversas razones en niños y adultos. En general, se utilizan para identificar anomalías focales o generalizadas del esqueleto.
Índice
Propósito de la prueba
Se puede realizar un estudio esquelético para investigar casos de abuso físico conocido o sospechado en niños, para buscar anomalías congénitas del esqueleto o para buscar enfermedades óseas en pacientes con cáncer conocido o sospechado. Los estudios esqueléticos se utilizan a menudo en adultos con sospecha de mieloma múltiple para buscar afectación ósea.
Tenga cuidado de no confundir un estudio esquelético con una gammagrafía ósea o una gammagrafía ósea. Se trata de una prueba diferente que utiliza una pequeña cantidad de radiotrazadores inyectados para crear una imagen del esqueleto.
Al igual que el estudio esquelético, la gammagrafía ósea se puede utilizar para detectar la afectación de los huesos por cáncer, infección o traumatismo. Sin embargo, es una prueba más compleja que se utiliza en situaciones específicas en las que las radiografías simples de los huesos no serían suficientes.
La tomografía computarizada (TC) de cuerpo entero , la resonancia magnética (RM ) y la tomografía por emisión de positrones (PET/TC) son pruebas sensibles para detectar la afectación ósea en ciertos tipos de cáncer. Estos exámenes son más costosos y requieren más tiempo que un estudio esquelético con rayos X, pero también pueden detectar anomalías que un estudio esquelético no detectaría. Su proveedor de atención médica elegirá el mejor estudio en función de su situación clínica específica y la práctica habitual en su institución.
El costo y la disponibilidad de una modalidad de diagnóstico por imágenes también pueden influir en la decisión. No dude en preguntar a su proveedor de atención médica por qué eligió una prueba diagnóstica en lugar de otra.
Riesgos y contraindicaciones
Cualquier estudio de diagnóstico por imágenes que utilice rayos X implica exposición a la radiación. Un estudio esquelético completo puede requerir alrededor de 20 radiografías y está asociado con una dosis moderada de radiación. En general, existe un riesgo bajo de efectos adversos para la salud relacionados con la exposición a la radiación a partir de un estudio esquelético.
No obstante, es aconsejable mantener las dosis de radiación lo más bajas posibles y utilizar sólo la necesaria para responder a la pregunta médica. Ciertas poblaciones, como los niños y las mujeres embarazadas, son más sensibles a la radiación y requieren especial precaución.
Antes de la prueba
Su médico puede solicitar un estudio esquelético como parte de la evaluación de alguna afección que se sospecha que afecta los huesos. Si, por ejemplo, un médico sospecha que su hijo puede sufrir un síndrome congénito , puede solicitar un estudio esquelético para buscar anomalías óseas, lo que puede ayudar a confirmar el diagnóstico o determinar la extensión de la enfermedad.
En los adultos, los análisis de sangre anormales pueden indicar la presencia de ciertos tipos de cáncer (como el mieloma múltiple) y se puede realizar un estudio esquelético para determinar si hay afectación de los huesos. Esta información ayudará a determinar el pronóstico y orientar el tratamiento.
También se pueden solicitar estudios esqueléticos en casos de sospecha de abuso infantil, particularmente en niños de dos años o menos.
A menudo, esto sucede en el departamento de emergencias cuando un niño se presenta con una lesión traumática. Algunos elementos de la historia clínica, el examen físico o la evaluación radiográfica pueden llevar a los proveedores de atención médica a sospechar un traumatismo no accidental. En este caso, se puede solicitar un estudio esquelético para buscar evidencia de otras lesiones que puedan aumentar la sospecha de abuso.
Momento
Reserve al menos una hora para la prueba. Un estudio esquelético típico consta de unas 20 radiografías individuales del cuerpo. La obtención de las radiografías llevará entre 25 y 40 minutos. También necesitará tiempo para registrarse y ponerse una bata.
Una vez finalizada la prueba, podrá regresar a su casa. Las imágenes se enviarán a un radiólogo u otro proveedor de atención médica para su interpretación. Los resultados suelen estar disponibles en uno o dos días hábiles.
Ubicación
Los estudios esqueléticos suelen realizarse de forma ambulatoria , en un centro de diagnóstico por imágenes que puede estar asociado a un hospital más grande. En casos de sospecha de abuso infantil, el estudio esquelético suele realizarse en el departamento de urgencias como parte de la evaluación secundaria del traumatismo.
Qué ponerse
Probablemente le pedirán que se ponga una bata. Asegúrese de usar ropa cómoda que sea fácil de poner y quitar.
Comida y bebida
Por lo general, no hay requisitos específicos de dieta ni ayuno antes de un estudio esquelético. Puede comer y tomar sus medicamentos habituales. Si tiene dudas, consulte al personal cuando programe el procedimiento. No se requiere material de contraste (tinte) oral o intravenoso para el estudio esquelético.
Durante la prueba
Prueba previa
El día de la prueba, los pacientes ambulatorios adultos se registrarán en el centro de diagnóstico por imágenes. Luego, un técnico en radiología los conducirá a la sala de rayos X. Asegúrese de avisar al personal si existe la posibilidad de que estén embarazadas. Lo más probable es que se les pida que se pongan una bata de hospital. Dado que el estudio esquelético requiere radiografías de pies a cabeza, la ropa de calle puede interferir con las imágenes.
Los estudios esqueléticos no requieren ningún trabajo de preparación específico. No se utiliza ningún medio de contraste (tinte) oral o intravenoso. No necesitará un catéter intravenoso (IV).
Durante toda la prueba
Un estudio esquelético típico consta de unas veinte radiografías simples de todo el cuerpo. En concreto, el examen incluye radiografías del cráneo, el tórax, el abdomen, la columna vertebral, ambos brazos y ambas piernas. Según la institución, también se obtendrán radiografías de las manos y los pies.
Las radiografías se pueden realizar con el paciente de pie o acostado. Las radiografías de las extremidades se realizan generalmente colocando la extremidad en una mesa de rayos X horizontal. Un técnico en radiología lo ubicará y estará disponible para responder cualquier pregunta que pueda tener durante la prueba.
Después de la prueba
Una vez finalizadas las radiografías, podrá cambiarse y regresar a su casa. No es necesario tomar precauciones específicas después y podrá reanudar sus actividades normales de inmediato.
Interpretación de resultados
Una vez obtenidas las imágenes, normalmente se envían a un radiólogo u otro profesional sanitario para su interpretación. Este profesional comunicará los resultados en forma de informe escrito. Normalmente, los resultados no tardan más de uno o dos días laborables en estar disponibles. Póngase en contacto con su proveedor de atención médica (el que solicitó la prueba) para obtener los resultados. A menudo, hay portales web disponibles que le permiten acceder directamente a su informe radiológico.
Si el estudio esquelético se realizó para evaluar el mieloma múltiple u otra forma de cáncer, el informe radiológico detallará si existen anomalías óseas causadas por la enfermedad. El mieloma múltiple causa anomalías óseas características que pueden denominarse “lesiones líticas”, “lesiones radiolúcidas” o “lesiones en sacabocados”.
Si el estudio esquelético se realizó por sospecha de abuso infantil, el informe indicará si hay fracturas, de qué huesos y de qué antigüedad son. Las fracturas en determinados lugares a veces son indicativas de un traumatismo no accidental. La presencia de múltiples fracturas de diferentes edades sugiere firmemente un abuso continuo.
Si se sospecha un síndrome congénito, el informe radiológico describirá si la apariencia de los huesos sugiere un síndrome particular.
Hacer un seguimiento
El estudio esquelético se utiliza para evaluar la presencia de enfermedades óseas en pacientes con mieloma múltiple. Las pruebas más avanzadas, como la tomografía computarizada de cuerpo entero, la resonancia magnética o la tomografía por emisión de positrones/tomografía computarizada, pueden ser más sensibles para detectar enfermedades. Su proveedor de atención médica puede optar por realizar imágenes más avanzadas si un estudio esquelético inicial fue negativo. Si está recibiendo tratamiento para el mieloma múltiple, es posible que se realice un estudio esquelético u otros estudios de imágenes para ver cómo está respondiendo a la terapia. El cronograma de seguimiento dependerá de su protocolo de tratamiento específico . Pregunte a su proveedor de atención médica para obtener más detalles.
Si, a pesar de un estudio esquelético inicial normal, se sigue sospechando que se ha producido un abuso infantil, es posible que se realice un nuevo examen al cabo de unas semanas. En ocasiones, las fracturas sutiles pueden hacerse más evidentes con el tiempo y pueden detectarse en el estudio de seguimiento.
Una palabra de Health Life Guide
La información obtenida a partir del estudio esquelético forma parte de un todo más amplio. En los casos de mieloma múltiple, los resultados de las imágenes se tendrán en cuenta en el cuadro clínico a la hora de formular un plan de tratamiento. Como siempre, es importante mantener una comunicación abierta con los profesionales sanitarios. No dude en preguntar por qué se toman las decisiones de tratamiento y qué factores influyeron en una determinada decisión.
Siempre debe sentirse libre de pedir una segunda opinión sobre los resultados de cualquier estudio de diagnóstico por imágenes. Puede solicitar que se copien sus imágenes y su informe radiológico para que los evalúen los proveedores de atención médica de otra institución.